Nimú
NIMÚ es un proyecto de branding integral para una empresa ficticia que ofrece espacios de descanso en lugares de tránsito o alta actividad, como aeropuertos, centros comerciales o estaciones, pensados para que las personas puedan dormir una siesta corta y recargar energía en medio de la rutina. La identidad visual se construye desde un enfoque divertido, amable y cercano, con un sentido del humor que rompe con la seriedad habitual del descanso o la hotelería. El nombre “NIMÚ” , refiriendose al silencio relacionado al descanso, refuerza ese tono desenfadado. Las frases de marca, como “Descansa en paz… pero solo un ratito”, aportan una actitud fresca y optimista. El universo gráfico se compone de una paleta de azul marino y amarillo, que transmite calma, energía y contraste visual. Además, se creó un personaje ilustrado sencillo y expresivo, que actúa como embajador de la marca y aporta cercanía con la marca.
Bolitas
Este proyecto de packaging parte de la idea de crear un producto inexistente: una marca de cereales para llevar, lista para comer en cualquier momento. El concepto se materializa en Bolitas, un nombre que juega con el doble sentido de “bol”, por su funcionalidad como recipiente, y “bolitas”, por la forma esférica de los cereales de miel que contiene. El envase se compone de dos partes superpuestas: una contiene los cereales y la otra la leche, funcionando juntas como un pequeño bol portátil. Además, incluye una mini cuchara integrada para completar la experiencia “ready to eat”. A nivel gráfico, el diseño combina azul marino y rosa claro, transmitiendo un tono moderno y alegre. La identidad visual se refuerza con un personaje animado, un bol, que aporta un toque divertido y cercano, en la línea de las clásicas marcas de cereales. El pack exterior es un recipiente que tiene una asa central que separa las dos unidades del producto, facilitando su transporte y aportando un acabado visual distintivo y funcional.
Nomad
El proyecto comenzó con una fase de experimentación visual centrada en la creación de líneas tipo garabato usando plantillas y técnicas de stencil, pero aplicadas de manera no convencional. En lugar de emplear el stencil para rellenar formas definidas, se utilizó para trazar, rayar y desbordar los bordes, generando trazos libres, gestuales y expresivos A partir de estos experimentos se inventó una narrativa conceptual, creamos NOMAD, un restaurante pop-up ficticio en Barcelona, cuyo chef viajó por el mundo 5 años, aprendiendo técnicas culinarias, para ofrecer un menú degustación efímero. La estética de los garabatos y los trazos libres se trasladó al logotipo, cartas, packaging y materiales promocionales, generando una identidad visual viva, humana y en constante movimiento, que transmite la idea de viaje, exploración y mezcla cultural.
